keltiak

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…y con Machado

Publicado por keltiak el 2 diciembre 2012
Publicado en: energía, letras, volando. Etiquetado: literatura, poesía, revolución. Deja un comentario

XXIX

Caminante, son tus huellas

el camino, y nada más;

caminante, no hay camino,

se hace camino al andar.

Al andar se hace camino,

y al volver la vista atrás

se ve la senda que nunca

se ha de volver a pisar.

Caminante, no hay camino,

sino estelas en la mar.

Imprescindibles – Antonio Machado. Los mundos sutilesVer vídeoImprescindibles - Antonio Machado. Los mundos sutiles
  • Imprescindibles – Antonio Machado. Los mundos sutiles

[Coup après coup, vers après vers.]

jugando con Cortazar (poema anónimo)

Publicado por keltiak el 2 noviembre 2012
Publicado en: energía, letras, volando. Etiquetado: literatura, revolución. 2 comentarios

el juego surge de esta entrevista

(…es curioso, ya conozco su voz y a veces se me cuela cuando leo sus relatos)

pero volviendo al juego, comienzo con los poemas anónimos

encuentros

búsquedas

Where’s the key??? (yo)

…y un regalo

poema(JVG)

jugando con Cortazar (graffiti)

Publicado por keltiak el 13 octubre 2012
Publicado en: energía, letras, una palabra, volando. Etiquetado: literatura, revolución. 5 comentarios

 jugar. (Del lat. iocāri).

tres acepciones de la rae…

1. intr. Hacer algo con alegría y con el solo fin de entretenerse o divertirse.

2. intr. Travesear, retozar.

3. intr. Entretenerse, divertirse tomando parte en uno de los juegos sometidos a reglas, medie o no en él interés.

Cortazar y sus sugerentes juegos

juegos con palabras, juegos con imágenes...

empiezo por el último relato que leí y que ya estoy deseando jugar

«Graffiti» (1981)

A Antoni Tàpies

Tantas cosas que empiezan y acaso acaban como un juego, supongo que te hizo gracia encontrar un dibujo al lado del tuyo, lo atribuiste a una casualidad o a un capricho y sólo la segunda vez te diste cuenta que era intencionado y entonces lo miraste despacio, incluso volviste más tarde para mirarlo de nuevo, tomando las precauciones de siempre: la calle en su momento más solitario, acercarse con indiferencia y nunca mirar los grafitti de frente sino desde la otra acera o en diagonal, fingiendo interés por la vidriera de al lado, yéndote en seguida.

Tu propio juego había empezado por aburrimiento, no era en verdad una protesta contra el estado de cosas en la ciudad, el toque de queda, la prohibición amenazante de pegar carteles o escribir en los muros. Simplemente te divertía hacer dibujos con tizas de colores (no te gustaba el término grafitti, tan de crítico de arte) y de cuando en cuando venir a verlos y hasta con un poco de suerte asistir a la llegada del camión municipal y a los insultos inútiles de los empleados mientras borraban los dibujos. Poco les importaba que no fueran dibujos políticos, la prohibición abarcaba cualquier cosa, y si algún niño se hubiera atrevido a dibujar una casa o un perro, lo mismo lo hubieran borrado entre palabrotas y amenazas. En la ciudad ya no se sabía demasiado de que lado estaba verdaderamente el miedo; quizás por eso te divertía dominar el tuyo y cada tanto elegir el lugar y la hora propicios para hacer un dibujo.

Nunca habías corrido peligro porque sabías elegir bien, y en el tiempo que transcurría hasta que llegaban los camiones de limpieza se abría para vos algo como un espacio más limpio donde casi cabía la esperanza. Mirando desde lejos tu dibujo podías ver a la gente que le echaba una ojeada al pasar, nadie se detenía por supuesto pero nadie dejaba de mirar el dibujo, a veces una rápida composición abstracta en dos colores, un perfil de pájaro o dos figuras enlazadas. Una sola vez escribiste una frase, con tiza negra: A mí también me duele. No duró dos horas, y esta vez la policía en persona la hizo desaparecer. Después solamente seguiste haciendo dibujos.
Cuando el otro apareció al lado del tuyo casi tuviste miedo, de golpe el peligro se volvía doble, alguien se animaba como vos a divertirse al borde de la cárcel o algo peor, y ese alguien como si fuera poco era una mujer. Vos mismo no podías probártelo, había algo diferente y mejor que las pruebas más rotundas: un trazo, una predilección por las tizas cálidas, un aura. A lo mejor como andabas solo te imaginaste por compensación; la admiraste, tuviste miedo por ella, esperaste que fuera la única vez, casi te delataste cuando ella volvió a dibujar al lado de otro dibujo tuyo, unas ganas de reír, de quedarte ahí delante como si los policías fueran ciegos o idiotas.
Empezó un tiempo diferente, más sigiloso, más bello y amenazante a la vez. Descuidando tu empleo salías en cualquier momento con la esperanza de sorprenderla, elegiste para tus dibujos esas calles que podías recorrer de un solo rápido itinerario; volviste al alba, al anochecer, a las tres de la mañana. Fue un tiempo de contradicción insoportable, la decepción de encontrar un nuevo dibujo de ella junto a alguno de los tuyos y la calle vacía, y la de no encontrar nada y sentir la calle aún más vacía. Una noche viste su primer dibujo solo; lo había hecho con tizas rojas y azules en una puerta de garage, aprovechando la textura de las maderas carcomidas y las cabezas de los clavos. Era más que nunca ella, el trazo, los colores, pero además sentiste que ese dibujo valía como un pedido o una interrogación, una manera de llamarte. Volviste al alba, después que las patrullas relegaron en su sordo drenaje, y en el resto de la puerta dibujaste un rápido paisaje con velas y tajamares; de no mirarlo bien se hubiera dicho un juego de líneas al azar, pero ella sabría mirarlo. Esa noche escapaste por poco de una pareja de policías, en tu departamento bebiste ginebra tras ginebra y le hablaste, le dijiste todo lo que te venía a la boca como otro dibujo sonoro, otro puerto con velas, la imaginaste morena y silenciosa, le elegiste labios y senos, la quisiste un poco.
Casi en seguida se te ocurrió que ella buscaría una respuesta, que volvería a su dibujo como vos volvías ahora a los tuyos, y aunque el peligro era cada vez mayor después de los atentados en el mercado te atreviste a acercarte al garage, a rondar la manzana, a tomar interminables cervezas en el cafe de la esquina. Era absurdo porque ella no se detendría después de ver tu dibujo, cualquiera de las muchas mujeres que iban y venían podía ser ella. Al amanecer del segundo día elegiste un paredón gris y dibujaste un triángulo blanco rodeado de manchas como hojas de roble; desde el mismo café de la esquina podías ver el paredón (ya habían limpiado la puerta del garage y una patrulla volvía y volvía rabiosa), al anochecer te alejaste un poco pero eligiendo diferentes puntos de mira, desplazándote de un sitio a otro, comprando mínimas cosas en las tiendas para no llamar demasiado la atención. Ya era noche cerrada cuando oíste la sirena y los proyectores te barrieron los ojos. Había un confuso amontonamiento junto al paredón, corriste contra toda sensatez y sólo te ayudó el azar de un auto dando vuelta a la esquina y frenando al ver el carro celular, su bulto te protegió y viste la lucha, un pelo negro tironeado por manos enguantadas, los puntapiés y los alaridos, la visión entrecortada de unos pantalones azules antes de que la tiraran en el carro y se la llevaran.
Mucho después (era horrible temblar así, era horrible pensar que eso pasaba por culpa de tu dibujo en el paredón gris) te mezclaste con otras gentes y alcanzaste a ver un esbozo en azul, los trazos de ese naranja que era como su nombre o su boca, ella así en ese dibujo truncado que los policías habían borroneado antes de llevársela; quedaba lo bastante como para comprender que había querido responder a tu triángulo con otra figura, un círculo o acaso un espiral, una forma llena y hermosa, algo como un sí o un siempre o un ahora.
Lo sabías muy bien, te sobraría tiempo para imaginar los detalles de lo que estaría sucediendo en el cuartel central; en la ciudad todo eso rezumaba poco a poco, la gente estaba al tanto del destino de los prisioneros, y si a veces volvían a ver a uno que otro, hubieran preferido no verlos y que al igual que la mayoría se perdieran en ese silencio que nadie se atrevía a quebrar. Lo sabías de sobra, esa noche la ginebra no te ayudaría más a morderte las manos, a pisotear tizas de colores antes de perderte en la borrachera y en el llanto.
Sí, pero los días pasaban y ya no sabías vivir de otra manera. Volviste a abandonar tu trabajo para dar vueltas por las calles, mirar fugitivamente las paredes y las puertas donde ella y vos habían dibujado. Todo limpio, todo claro; nada, ni siquiera una flor dibujada por la inocencia de un colegial que roba una tiza en la clase y no resiste el placer de usarla. Tampoco vos pudiste resistir, y un mes después te levantaste al amanecer y volviste a la calle del garage. No había patrullas, las paredes estaban perfectamente limpias; un gato te miró cauteloso desde un portal cuando sacaste las tizas y en el mismo lugar, allí donde ella había dejado su dibujo, llenaste las maderas con un grito verde, una roja llamarada de reconocimiento y de amor, envolviste tu dibujo con un óvalo que era también tu boca y la suya y la esperanza. Los pasos en la esquina te lanzaron a una carrera afelpada, al refugio de una pila de cajones vacíos; un borracho vacilante se acercó canturreando, quizo patear al gato y cayó boca abajo a los pies del dibujo. Te fuiste lentamente, ya seguro, y con el primer sol dormiste como no habías dormido en mucho tiempo.
Esa misma mañana miraste desde lejos: no lo habían borrado todavía. Volviste al mediodía: casi inconcebiblemente seguía ahí. La agitación en los suburbios (habías escuchado los noticiosos) alejaban a la patrulla de su rutina; al anochecer volviste a verlo como tanta gente lo había visto a lo largo del día. Esperaste hasta las tres de la mañana para regresar, la calle estaba vacía y negra. Desde lejos descubriste otro dibujo, sólo vos podrías haberlo distinguido tan pequeño en lo alto y a la izquierda del tuyo. Te acercaste con algo que era sed y horror al mismo tiempo, viste el óvalo naranja y las manchas violetas de donde parecía saltar una cara tumefacta, un ojo colgando, una boca aplastada a puñetazos. Ya sé, ya sé ¿pero qué otra cosa hubiera podido dibujarte? ¿Qué mensaje hubiera tenido sentido ahora? De alguna manera tenía que decirte adiós y a la vez pedirte que siguieras. Algo tenía que dejarte antes de volverme a mi refugio donde ya no había ningún espejo, solamente un hueco para esconderme hasta el fin en la más completa oscuridad, recordando tantas cosas y a veces, así como había imaginado tu vida, imaginando que hacías otros dibujos, que salías por la noche para hacer otros dibujos.
…redecora tu ciudad!
Imprescindibles :

http://www.dailymotion.com/video/xr0zl0_imprescindibles-cortazar-part-1_shortfilms

http://www.dailymotion.com/video/xr0zll_imprescindibles-cortazar-part-2_shortfilms

conversaciones

Publicado por keltiak el 30 mayo 2012
Publicado en: artes, volando. Etiquetado: anotaciones, literatura. 7 comentarios

conversacion Juan Muñoz 1996

Capítulo 46:

«…frente a la mole opulenta con torreones, mansardas y tejados de pizarra del hotel Plaza, hay una obra de Juan Muñoz que se titula «Conversaciones»: cinco figuras, de una escala inferior a la humana, con cabezas muy parecidas de rasgos vagos, con los craneos desnudos, con una sugerencia monacal o budista acentuada por la especie de túnicas que visten, que se abren hacia abajo en un vuelo de faldones, y no acaban en piernas o pies, sino en formas esféricas, muy anchas, como las bases pesadas de los tentetiesos…

En medio de todo, tangibles y sin embargo remotas, heladas al tacto, las figuras de Juan Muñoz permanecen sumergidas en la campana de vidrio invisibles de sus conversaciones y gestos misteriosos.» (Antonio Muñoz Molina «Ventanas de Manhattan»)

Me encanta su trabajo y su representación de la comunicación/incomunicación

muy recomendable este documental:

http://www.rtve.es/alacarta/videos/imprescindibles/imprescindibles-juan-munoz-poeta-del-espacio/1144975/

gotas

Publicado por keltiak el 23 mayo 2012
Publicado en: letras, volando. Etiquetado: anotaciones, poesía. 4 comentarios

 Aplastamiento De Las Gotas

Yo no sé, mirá, es terrible cómo llueve. Llueve todo el tiempo,afuera tupido y gris, aquí contra el balcón con goterones cuajados y duros, que hacen plaf y se aplastan como bofetadas uno detrás de otro qué hastío. Ahora aparece una gotita en lo alto del marco de la ventana,se queda temblequeando contra el cielo que la triza en mil brillos apagados, va creciendo y se tambalea,ya va a caer y no se cae, todavía no se cae.

Está prendida con todas las uñas, no quiere caerse y se la ve que se agarra con los dientes mientras le crece la barriga, ya es una gotaza que cuelga majestuosa y de pronto zup ahí va, plaf, deshecha, nada,
una viscosidad en el mármol.
Pero las hay que se suicidan y se entregan en seguida,
brotan en el marco y ahí mismo se tiran,
me parece ver la vibración del salto, sus piernitas desprendiéndose y el grito que las emborracha en esa nada del caer y aniquilarse.
Tristes gotas, redondas inocentes gotas.

Adiós gotas.

Adiós.

Julio Cortázar

 

inspirando…

Wabi-sabi 侘・寂

Publicado por keltiak el 18 mayo 2012
Publicado en: artes, energía, letras, volando. Etiquetado: anotaciones, literatura, revolución. 6 comentarios

侘・寂   Wabi-sabi: 

 

» wabi-sabi nutre todo lo que es auténtico, ya que reconoce tres verdades simples:

nada permanece

nada ha terminado

nada es perfecto» (R. R. Powell).

 

wabi procede del verbo wabu, que significa languidecer, y del adjetivo wabishii, que se usaba para describir los sentimientos de soledad, desolación y desdicha.

Wabi, significa realmente «pobreza», es decir, no depender de las cosas terrenas —riqueza, poder, reputación— y sin embargo sentir interiormente la presencia de algo sumamente valioso por encima del tiempo y la posición social.

sabi intenta transmitir una sensación de desolación. Implica un espíritu de absoluta soledad y la idea de que no hay nada que permanezca inmutable y de que todos los seres vivos están destinados a morir.

Procede del vivo deseo que sentimos de recuperar el mundo de nuestra infancia, el mundo del momento presente, no definido por el lenguaje o los valores que constituye una pura experiencia de la realidad. La soledad, por ejemplo, de un trozo de verde en la incipiente primavera comunica la idea de sabi o wabi, pues en ese pequeño rincón de verdor está contenida la sugerencia de la fuerza vital en medio de la desolación del invierno.

Estrechamente relacionado con el budismo zen, el wabi sabi no es solo una corriente estética oriental sino que también puede ser considerado una visión del mundo.

intimas.. las cosas wabisabi son generalmente pequeñas y compactas discretas y orientadas hacia dentro

sugieren el proceso natural

» Wabi-Sabi para artistas , diseñadores, poetas y filosofos»

Leonard Koren, hipotesi-renart edicions Barcelona (1998)

wabi-sabi

es posible que no termine de captar todo lo que supone este concepto

simplificando, mi idea de wabisabi es encontrar la belleza en las cosas cotidianas,

o casi como  dejarte sorprender por ella en donde menos lo esperas…

si salgo de lo puramente estético y voy al campo emocional,  encuentro muchos momentos «wabisabi» entre toda la mierda que nos rodea

no creo que sea casualidad, muchos de ellos los noto durante acciones del 15M, se crea un clima muy especial entre las personas que te hace ver con otra mirada, se te queda impregnado y da energía

 

y  ya sumándolo al  lado racional (hay mil y una razones…)

…cómo dejar de salir a las calles en lo que esto no cambie?

http://www.diagonalperiodico.net/Una-hora-de-encierro-para-ahogar.html

http://fotograccion.org/wp/2012/05/fotos-cacerolada-%C2%A1la-prima-esta-en-500-y-secuestro-policial/

hoy:

http://madrid.tomalaplaza.net/2012/05/17/convocatoria-cacerolada-ante-la-comision-europea-18m/

y este fin de semana:

http://www.fsmmadrid.org/web2/attachments/560_ACTUALIZADO_14mayo.Programa%20Foro%20de%20Madrid%202012.pdf

mayo global

19-20 Mayo

#12M15M

Publicado por keltiak el 11 mayo 2012
Publicado en: energía. Etiquetado: economía, política, revolución. 6 comentarios

12M

99%

+info:

http://madrid.tomalaplaza.net/2012/05/06/acciones-madrid-mayo-2012/

http://madrid.tomalaplaza.net/mayo-2012/

http://www.democraciarealya.es/blog/2012/05/02/12m15m-mapa-de-convocatorias/

http://www.kaosenlared.net/component/k2/item/17909-el-12m-15m-debe-ser-la-suma-de-indignados-%20-movimiento-obrero-%20-movimientos-en-defensa-de-lo-p%C3%BAblico.html

http://madrid.tomalaplaza.net/2012/04/13/camino-a-mayo-de-2012-material-grafico/

http://madrid.tomalosbarrios.net/1819077/carteles-12m15m/

http://legal15m.wordpress.com/2012/02/18/razones-para-denunciar-una-agresion-policial/

http://www.globalmay.org/blog/item/60-inidgnados-dry-global-mayo12-boletin-#12m15m-no3&Itemid=145

http://madrilonia.org/2012/05/kit-indignado-y-consejos-para-vivir-un-12m15m-de-escandalo/

y esto que no se muy bien como tomármelo…

http://www.rtve.es/noticias/20120510/fiscalia-apoya-15m-se-concentre-96-horas-seguidas-sol-del-12-15-mayo/524081.shtml

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Nos vemos en las calles!!!

 

 

Feminismos_Sol

octavilla

Publicado por keltiak el 27 abril 2012
Publicado en: energía, mujeres. Etiquetado: anotaciones, cine, revolución. 2 comentarios

ejemplo

La octavilla es una hoja de papel cuyo tamaño (11 x 16 cm) es la mitad de una cuartilla, la octava parte de un pliego de papel, de donde le viene el nombre.

Las octavillas se han usado como soporte a los panfletos para difundir ideas políticas o sociales desde el Renacimiento, con la difusión de la imprenta.

Actualmente las redes sociales no digo que no sean geniales en este sentido,

pero no hay que perder la calle, además ante los decretazos a los que se creen que nos tenemos que acostumbrar, mejor no perder de vista ningún método de difusión

Por casualidad, a través de una peli, conocí a una mujer a la que allá en el 43 sentenciaron a muerte en la Alemania nazi, por unas octavillas…

Sophie Scholl

sophie scholl

El 22 de febrero de 1943, a la edad de 21 años Sophie Scholl fue ejecutada por disposición de la Corte Popular de Alemania,  por haberse involucrado en La Rosa Blanca, una organización que redactaba en forma secreta panfletos que pedían el final de la guerra y denunciaban enfáticamente los actos de barbarie de los nazis…

+info: http://www.raoulwallenberg.net/es/holocausto/articulos-65/sophie-scholl-rosa-blanca/

http://es.wikipedia.org/wiki/Sof%C3%ADa_Scholl

por ejemplo(JVG)

 

 

 

a golpe de palabras

y lanzando mariposas

 

 

 

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